No
sé a ti, pero, para mí, el verano me saca la mejor de las sonrisas, de esas que
no se pueden evitar. Ya sé, estamos metidos en pleno Julio voy un poco tarde…
pero solo un poco.
En
esta estación, parece que todo adquiere un color más especial, los sentidos se
me disparan como radares y descubro como ese mundo que estaba ahí, parece
más brillante.
Si como yo, tienes la suerte de vivir en un sitio cercano
al mar, este periodo es el más esperado de todo el año, no podrás
negármelo. Un ratito cerca de la playa cada día hace que las cosas cotidianas
que nos preocupan pierdan por un momento su importancia. Personalmente, siempre
he sentido una conexión con el mar, es hipnótico “algo tiene, que me retiene”.
Noto
esa felicidad cuando empieza a llegar el olor a sal, a crema solar, a café con
hielo y gazpacho. Sabe a helado, a fruta fresca, a besos bajo el agua. Los
zumos naturales tienen más sabor y una cervecita junto al mar con los amigos es
la mejor terapia que hay.
El tacto de la arena entre los pies, la brisa
que se cuela por el pelo cuando vas montada en la bicicleta, las carreras en
chanclas detrás de los niños…
La
barbacoa a todo gas con comidas, meriendas y cenas al aire libre. Reencuentros
compartiendo risas y crear nuevos recuerdos con amigos y familia…mecidos por la
suave temperatura de la noche del verano.
El
cielo se despeja y aparecen más estrellas de las que podrás contar jamás en una
sola vida, tumbada en una hamaca bajo ese cielo oyendo los grillos, eso para
mí, es paz. Llegan sonidos de olas al romperse, de conciertos de verano, de
querer estar en la calle todo el día… Ciclos que se cierran y otros nuevos que comienzan.
Por
ello es cuando, en este periodo, hay que subir esta vibración para aprovechar
todo lo bueno que puede hacer por nosotros el verano.
No
solamente recibir la Vitamina D del sol, tomando las precauciones para la piel
por supuesto, sino que en esta estación cargaremos nuestras pilas de cara al
otoño.
He
recopilado unos tips que espero que os sirvan, o por lo menos que si no habéis
pensado en ellos os despierte la curiosidad.
¡Vamos
a ello!
- Ajústate a esta estación:
A parte de preparar tu piel, pelo y ropa hay cosas que hay que ajustar de cara al verano, para mí una de las cosas más importantes es la alimentación, sobre todo si tienes niños en casa. Para no caer en malos hábitos o ir a lo fácil a la hora de las comidas, prepárate eligiendo bien aquellos platos más fresquitos, échale imaginación y atrévete a probar cosas que, quizás, hasta ahora no te habías planteado probar.
Mi
última adquisición ha sido Los libros de Leire Piriz:
Zumoterapia para las cuatro estaciones y Smoothies verdes. Tienen un montón de
recetas para hacer, con información nutricional que es buenísima, sencilla de
entender y de alto valor.
Ya estoy mirando un montón de ellas que me encantan, la licuadora está de camino, hora de experimentar y saborear el resultado. ¡En casa lo vamos a disfrutar un montón!
*Las compré directamente en Amazon poniendo su nombre, os los recomiendo.
* Para saber más sobre ella y su trabajo, es fantástica. http://www.leirepiriz.com
- Descanso mental: 10-15 minutos para ti antes de arrancar el día o a media tarde para recargar pilas. Medita, baila, escuchar música, leer un capítulo de tu libro favorito, hacer algo por y para ti en este tiempo sin que nadie te moleste. Intenta encontrar también un ratito para “no hacer absolutamente nada”.
Deja que tu mente descanse y céntrate en el momento presente, no
pienses ni hagas nada más allá que “simplemente estar”.
Mi
truco con los niños es: como ya tengo cogida más o menos la hora al pequeño que es muy
madrugador, me pongo la alarma quince minutos antes para poder disfrutar a gusto
de este ratito. Notarás que empiezas el día de otra manera. Todo fluirá con más calma.
Intento que, según me despierto no salir corriendo
de la cama sino, tener ese primer ratito despierta, pero tranquila, para ir
visualizando mi día con todo lo que me espera.
- Muévete: Pero bueno… ¿no acabas de decir que no haga nada?... Pues sí, pero hay que repartir los momentos. Descansa un rato pero el resto del día sal a la calle y mueve ese cuerpo a donde los pies te lleven. Sea al trabajo, de Paseo, nadar, montar en bici, deportes al aire libre, acuáticos, jugar con tus hijos… las posibilidades son tantas como tú quieres que sean.
- Llena tu vida de música: Aprovecha los conciertos, las canciones frescas tan pegadizas del verano. Enciende la radio, llena tu vida de música. Verás como tu vibra sube y de paso tus endorfinas. En casa, en el coche, ¡la música nos eleva por encima de lo mundano!
- Deja que el color se quede: Si el sol, las frutas, la naturaleza sacan su mejor colorido en esta época, no vayas a quedarte atrás. Llena tu armario, accesorios, pulseras de colores vivos. Llega el color a las uñas, al pelo, a los bolsos y los labios… Hará que te sientas con más ánimo, ¡estoy segura!
- Cuida la información que te entra: Selecciona muy bien la información que te llega del exterior, sobre todo si hay niños cerca. No hay censura en las televisiones, parece que no hay restricción horaria para sacar ciertos tipos de contenidos que pueden dañar a los más pequeños. Cambia la revista de cotilleos por un libro que hayas querido leer durante todo el año, haz ese curso on line pendiente.. Seguro que hay algo que te has quedado con ganas de hacer. Consíguelo y dale caña. Este año descubrí lo que es tener una agenda pequeña para el bolso. No se trata de escribir para no olvidar sino, para planificar algo grande en pequeños pasos. Me he dado cuenta que, disfruto más de todo el proceso poniéndome pequeñas tareas diarias, así mantengo mi ilusión por el proyecto que estoy haciendo y me da la sensación de que no hay prisa y realmente disfruto con todo aquello que tengo por delante.
- Reevalúa el primer semestre: Dale un repaso a las cosas que has conseguido este año y felicítate por ello. Piensa en lo bien que te sentiste cuando obtuviste aquello que tanto querías conseguir y da las gracias por ello. Si hay algo que no conseguiste o lo dejaste a medias, no te tortures. Haz una crítica constructiva de la situación y piensa si realmente hiciste todo lo que pudiste para llegar hasta ello. Te queda medio año ¿crees realmente que lo que resta de este año podrías llegar a lo que te has planteado? Es hora de reevaluar, de ser sincero con uno mismo y seguir hacia adelante.
- Llena tu vida de amor: En esta estación hay ciclos que terminan y otros nuevos que empiezan para ti. Seguramente abrirás la puerta a tu vida de personas nuevas tanto a nivel de amistad, como de amor. Si ya tienes pareja y coincidís unos días de vacaciones la paciencia será tu arma. Aprovecha esos momentos para hablar de cosas que el día a día no te permite profundizar. Si también tienes hijos, dedícales tiempo, comparte con ellos juegos, besos, canciones, preparar recetas fresquitas, guerras de globos de agua, excursiones… yo me convierto en una niña más, y me encanta.
- Sé feliz: Intenta mantener el enfoque en tu felicidad. En cuanto entiendas que tú eres responsable de tu propia felicidad, hallarás tu camino. No vivas en la vida de otros, no intentes entender el comportamiento de otros, no te metas en mente ajena porque esa será tu perdición. Enfócate en lo que realmente importa, en ti y en los que amas. Selecciona aquellas pequeñas cosas que te hacen feliz y practica, practica sin fin.
- ¡Sigue creando! : No dejes que la maquinaria se pare. Si estás en fase creativa o con proyectos, dale forma incluso de vacaciones. Si te apasiona lo que haces no dejarás de crear, cada día un granito más.
Te deseo un verano lleno de momentos inolvidables, grandes aventuras y de alguna que otra locura 😂
Que antes de que la vida te sonría, sonríe tú primero para atraer
hacia ti todo aquello que te mereces, que esperas y que la felicidad te pille en cada esquina.
Como siempre escrito con
mucho ♥️ para 🥰gente bonita.
¡Disfruta del verano. Disfruta de la vida! 😎